El SACRIFICIO DE SER BOXEADOR
Ser boxeador profesional requiere mucho más que sólo subirse al ring. Implica semanas de duros entrenamientos, una dieta estricta supervisada por expertos y muchos sacrificios más.
El sacrificio
Además del gasto inicial en equipo deportivo, se necesita un nutricionista, preparador físico y pagar al entrenador. Todo antes de la primera pelea y con pocas ganancias al iniciar.
También significa dejar de lado festividades familiares cuando se está en concentración, enfocarse al 100% en el deporte las 24 horas. Cuidar la alimentación y estado físico a detalle.
Pocos logran dedicarse por completo al boxeo, la mayoría trabaja otro empleo además de entrenar. Pese a los largos meses de preparación y riesgo dentro del cuadrilátero, a menudo los pagos no son los más altos.
Historias como la de Canelo Alvarez muestran que se necesita mucho empeño y disciplina desde temprana edad para poder llegar a lo más alto. Su éxito se lo ha ganado a pulso tras años de esfuerzo.
No juzguemos a un boxeador profesional sólo por lo que vemos en el ring. Detrás hay mucho sacrificio del que pocas veces somos conscientes.