Hace poco más de 10 años que volvió a televisión abierta el boxeo en México, principalmente de la mano de la televisora TV Azteca que sabado a sabado comenzó a transmitir carteleras tanto nacionales como internacionales, saltando a escena boxeadores en aquel entonces poco conocidos en México como Orlando Salido, Fernando Montiel, Antonio Margarito y la creciente y famosa «Promesa» en su momento como lo fue Julio César Chávez Jr.

Algo estaba claro, la televisora del ajusco (TV Azteca) se apoderaba cada fin de semana de la audiencia nacional con sus transmisiones de boxeo y la gran camarilla de figuras mediáticas que mencionamos atrás. Mientras Azteca usaba toda su infraestructura para apoyar a Chávez Jr en aquel tiempo, Televisa, la otra gran televisora mexicana ya estudiaba su jugada para poder arrebatar el rating a toda costa a su rival comercial de cualquier forma. El propósito no era sencillo, necesitaban un boxeador que estuviera invicto, que fuera muy joven, que fuera medianamente bueno, que tuviera cierto atractivo con las mujeres y sobre todo que fuera atípico a los boxeadores que regularmente surgen en México.

Es aquí donde nace Saul «Canelo» Alvarez, un chico joven, invicto, pelirrojo, que iniciaba en el boxeo y que tenía facha de todo menos de boxeador. ¿Como haría Televisa para posicionar a este joven inexperto y desconocido peleador en los primeros planos del boxeo? Pues de la forma que lo ha hecho con todo lo que toca, usaron todo su poder mediático para crearle una historia de telenovela a Canelo e insertarlo en el medio artístico y el psique de la gente a como diera lugar.

De repente Canelo empieza a ser el protagonista de las carteleras de Televisa a sus 18 años donde en sus peleas se veían artistas de la talla de Vicente Fernandez o Pepe Aguilar, luego muy convenientemente empieza un «Noviazgo» con la entonces conductora de televisa deportes, Marisol González para aparecer casi a diario en revistas de chismes y espectáculos que nada tenían que ver con boxeo, en pocas palabras MANIPULACIÓN.

El trabajo estaba hecho, Canelo era ahora conocido por todo México y lograba acaparar una gran audiencia peleando palmo a palmo por el rating televisivo de los sábados de boxeo. El joven boxeador pelirrojo que tenía un romance con una actriz de televisión ya era imposible de ignorar. Así televisa fue tejiendo la carrera de Canelo con pinzas hasta hacerlo campeón, pero un campeón que carecía de algo que en el boxeo llega a ser imperdonable y eso se llama Credibilidad.

Para muchos era un boxeador fabricado, un campeón de mentiras que fue llevado al estrellato gracias al poder de la televisión y que hasta antes de Floyd Mayweather no tenía mucho de qué presumir en su record que iba desde ex campeones en el ocaso de su carrera, hasta boxeadores de un peso inferior al del tapatío. Cuando llega la primera y única derrota (con Mayweather), pareciera que el tiempo le daba la razón al sector detractor de canelo, quien salió exhibido, humillado y frustrado ante el compromiso más grande e importante de su carrera; por el que Televisa había trabajado detalladamente para concretar desde que descubrió al joven boxeador de Guadalajara.

Parecía que todo había quedado claro, Canelo solo era un producto de la televisión que había sido moldeado para llevarlo a una pelea millonaria y luego desecharlo cual vil actor entrado en años sin carisma ni gracia. Pues es aquí donde empieza la verdadera historia del Canelo, la del boxeador, la del deportista, la del atleta, no la del chico de farándula. Justo después de Mayweather es que Canelo empieza a ser de verdad, rompe relaciones con Televisa, deja su «Noviazgo» fabricado y comienza a salir menos en notas de revistas de espectáculos.

Canelo se reivindica con sus detractores volviendo a ser campeón y logrando grandes actuaciones tomando peleas de suma importancia y riesgo como: Erislandy Lara, Miguel Cotto, James Kirkland, Liam Smith y Julio César Chávez Jr.

Por fin Canelo logra credibilidad a base victorias, de boxeo y de trabajo propio, logra convertirse en el boxeador mejor pagado del mundo y el más vendedor de PPVs poniéndose en la antesala de la pelea más esperada ante Gennady Golovkin cuando nadie creía que la tomaría.

En pocas palabras Canelo dejó de ser de mentiras para convertirse en realidad, una realidad que consiguió siendo:

Canelo el boxeador, no Canelo la estrella.

Comments

  1. Se reivindica????
    Ronando

  2. De hecho no es nada bueno, comienza diciendo verdades, pero luego se aleja de estas cuando ignora que Álvarez perdió claramente con Lara, venció a un Cotto sobre quien tenía una enorme ventaja de peso, que Liam Smith es un bulto genuino, y que Chávez Jr. -de méritos siempre cuestionables- además de estar lejos de su prime, fue obligado a un catchweight por el cual perdió la pelea aún antes de subir al ring. Álvarez sigue siendo un producto, y sus logros boxísticos, si es que los tiene, son muy pocos.

  3. Perdio claramente con lara? jajajaja no se que pelea hayas visto, yo recuerdo a un lara corriendo por todo el ring como una gallina,,, asi se gana una pelea?

  4. Peleas de suma importancia y riesgo?? Julio C. Jr.??

    Por favor….

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